OTRO GRAN CONCIERTO DE PEPE SÁNCHEZ EN LA ALCARRIA. Por Pepe Machado

Gran concierto de Pepe Sánchez Big Band en el Festival de Jazz Solsticio de Verano

 

Uno de los grandes conciertos que Pepe Sánchez y su Big Band ha celebrado este verano, tuvo lugar en Huete (Cuenca). En esta ciudad también conocida como la “capital de La Alcarria Conquense” se organiza el Festival de Jazz Solsticio Verano dentro de un entorno privilegiado como es el de los jardines de la Bodega del Pago Calzadilla. Numerosos aficionados acudieron a esta cita en el que la excelencia de la música y del vino se unen por iniciativa de la Fundación Huete Futuro.
 

Pepe Sánchez Big Band en el concierto Jazz Solsticio de Verano en los bellos jardines de la Bodega Calzadilla.

(Fotos Pepe Machado)

La formación instrumental de Pepe Sánchez estuvo integrada por Raúl Sánchez, piano; Paco Ibáñez y Antonio Ramos, trompetas; Antonio Pallarés, trombón; Juan Ramón Arias, Rafael Serrano y Miguel Ángel Egido, saxos; Nacho Alonso, bajo, y batería y dirección de Pepe Sánchez. El selecto repertorio incluyó excelentes versiones de American Patrol, In the Mood, Take Five, Tuxedo Junction… y algunas composiciones de Pepe Sánchez como Donde quiera que estés, balada que el músico ha compuesto y dedicado a la Bodega Calzadilla. En la segunda parte del concierto, intervino Araceli Lavado que ofreció grandes clásicos como Amor, amor, Ansiedad, New York, New York, I can’t take my eyes off you… interpretados con sus desbordantes facultades.


 

Pepe Sánchez, además de la dirección de la Big Band , realizó una soberbia demostración con su batería, ratificando la vigencia de la distinción que hace unos años le hizo la revista norteamericana “Modern Drummer” como uno de los cuatro mejores baterías en el ranking mundial.

Calzadilla, el vino de Fernando Alonso

En este Festival se produce un maridaje perfecto: la música de alto nivel con un gran vino. Bodega Calzadilla, que aporta el marco incomparable de sus bellos jardines a este festival de jazz, posee una denominación de origen propia, concesión que las autoridades enólogas conceden en casos muy especiales. Es el resultado de la aventura en la que se embarcó la familia Uribes Madero creando en 1980 una plantación y una bodega con el objetivo de cultivar y elaborar vinos muy personales y de alta calidad que transmitiesen la pasión de esta familia, las características de sus variedades y la singularidad de esta tierra única que se encuentra en el Valle del Río Mayor y que dispone de un microclima que protege el viñedo de las inclemencias atmosféricas.

Las instalaciones de la D.O. Pago Calzadilla comprenden actualmente 26 hectáreas, 20 de las cuales están dedicadas al viñedo con una producción anual de 100.000 kilos de uva con la que elaboran tintos de larga crianza. La reducida y limitada producción de la Bodega Calzadilla, permite a su entusiasta equipo trabajar con sistemas de viticultura artesanal durante todo el proceso de elaboración. 

Cuando Francisco Uribes, alma mater junto a su esposa de esta maravillosa aventura, nos mostró las instalaciones de Bodega Calzadilla, cuidadas al detalle palmo a palmo, comprendimos que es la pasión que pone esta familia en la elaboración de sus delicados vinos, la razón de su gran éxito en el mercado nacional e internacional. Tras la visita disfrutamos una cata de su gama: Gran Calzadilla, Calzadilla Allegro, Calzadilla Classic y Opta. La Reserva es la elegida por Fernando Alonso, nuestro Campeón del Mundo de Fórmula 1, para agasajar a sus amigos. 

Colección privada de F. Alonso.

–Sr. Uribes, la D.O. Pago Calzadilla no solo produce vino con carácter y personalidad sino también un vino campeón, el favorito de Fernando Alonso…

–Fernando hizo una selección de bodegas y eligió la nuestra. Le gustó nuestra filosofía, la de nuestro producto y la exclusividad que tiene nuestro vino, que no está en todos los sitios sino en lugares exclusivos. Llevamos ocho años haciéndole una colección privada del Reserva Calzadilla con una etiqueta distinta cada año, unas dos mil botellas al año.

Pero nos consta que él no bebe, las regala a sus amigos en los circuitos con el orgullo de que es vino español. Otra curiosidad es que tenemos un restaurante, uno de los mejores de París, para el que hacemos una etiqueta exclusiva cada año. La de 2012 la ha diseñado Miquel Barceló.

–Un vino de tanta calidad tendrá un mercado muy especial…

–Sí, España antes consumía todo lo que se producía pero ahora se ha reducido el consumo de las cosas, digamos, un poco más superfluas. Eso nos ha llevado a exportar nuestro producto, especialmente a Suiza por el gran conocimiento que tienen allí del vino y a China porque es un país que quiere buenos productos. Además de Estados Unidos, Francia, Alemania…

–En España, la tendencia es a consumir mejores vinos?

–Sí pero está bajando la cantidad, actualmente solo se consume 17 litros por persona y año. Ahora en lugar de los graneles, los cartones y las botellas de litro, se va buscando la denominación de origen, la variedad, la bodega, la marca, y es donde nosotros hemos tenido buena aceptación en España. El público también va cambiando, compra el vino en vinotecas, en los restaurantes la carta es generosa y hay un sumiller al que se escucha y el vino se comenta en las comidas…

Con Francisco Uribes recorrimos la Bodega Calzadilla

comprendiendo la pasión que pone esta familia en sus vinos.  

-Pues enhorabuena por lograr un vino de tan alta calidad en una bodega relativamente pequeña y utilizando medios artesanales y productos naturales…

–Es un camino muy largo cuando no hay apoyos estatales, cuando no hay subvenciones y no hay publicidad. Todo lo vamos haciendo de botella en botella pero estamos muy contentos porque llegamos a veintidós países.

Este proyecto obedece a una gran vocación. Cuando comencé en 1980, los vinos de la región Castilla La Mancha era muy deficientes, solo eran graneles. Unos diez años después logramos un vino de calidad, vocación y artesanía. Son vinos completamente naturales, distintos, notorios.

Cata de los vinos D.O. Calzadilla presentes en 22 países.

–Por último, felicidades a Bodega Calzadilla por celebrar en sus bellos jardines, el concierto Jazz Solsticio de Verano en el que la Big Band de Pepe Sánchez ha tenido un gran lucimiento.

–La verdad es que tenemos una buena sintonía con Pepe Sánchez. Ha sido un gran concierto de jazz en el que hemos tenido la asistencia de muchísimo público. Hemos disfrutado de la música de este excelente artista y de su Big Band, igualmente excelente, en un marco y ambiente inigualables, los jardines de nuestra bodega en el corazón de La Alcarria, sintiendo y viendo el anochecer del solsticio de verano. Se trata de un acto de nuestra Fundación Huete Futuro para hacer realidad la finalidad de la misma: “recuperar el pasado de Huete para construir su futuro”.

Por último, dos recomendaciones a mis lectores: visitar Bodega Calzadilla, que está a solo 126 kiómetros de Madrid, poco más de hora y media de camino; y asistir a cualquiera de los conciertos que Pepe Sánchez dará próximamente en la Comunidad de Madrid para disfrutar la buena música en vivo. Dos placeres que nadie debería dejar escapar.

Por Pepe Machado
(Fotos del autor)
www.pagocalzadilla.com/web/es